18 mayo 2013

Reseña e impresiones de Nameless Gangster



De nuevo gracias a Cameo, nos ha sido posible ver la película que tanta repercusión ha tenido en Corea del Sur y que además ha llegado a nuestro país incluso a la gran pantalla. Estamos hablando de Nameless Gangster.
 

Este film dirigido y guionizado por Yun Joong-bin se centra en los años ochenta de Corea del Sur, donde un funcionario corrupto de aduanas, a punto de ser despedido, que encuentra un alijo importantemente grande de droga. Esto hace que busque una forma de venderla, empezando a relacionarse con la mafia coreana. A todo esto, encuentra que un capo de Busan, es un familiar lejano suyo, y utiliza esta treta para que este ceda a negociar para él. Así empieza las andaduras del funcionario ambicioso, introduciéndose en el mundo de la mafia y los gangsters, cuando en los años 90, el gobierno de Corea decide tomar cartas en el asunto contra el crimen organizado.

Empezando por este hilo argumental, se nos presenta un film de gangster, que aunque contiene las características principal, muestra otras sutilezas que lo diferencian.
La historia transcurre desde que el protagonista se introduce en el mundo de la mafia, en los ochenta, hasta su vejez, con los cambios políticos que representa y sobretodo con la época del gobierno contra el crimen organizado, siendo uno de los nudos principales del film.
El ambiente del film, siempre en un toque sepia y gastado, le da antigüedad a la historia y el punto que le hace falta para darle ese toque de cine negro o de gangster, como estamos acostumbrados. Pero lo interesante de este film, es que entre los trapicheos entre bandas de mafiosos, así como sus negocios, peleas y trapicheos, hay un toque de humor que lo redondea Choi Min-sik, el actor que representa al  protagonista de la historia.

Consigue hacer que el espectador, a pesar de estar viendo un mundo oscuro, de corrupción y violencia, esboce una sonrisa delante de la forma de ser del protagonista, de la astucia de este, admirando su tesón y su ambición.
Sin duda, la actuación de Choi Min-sik es deslumbrante, ya que ha cogido un matiz de personalidad y la ha explotado a lo grande. El protagonista, es alguien corrupto de por si, pero con la única razón de ser algo en su vida, ya que ha crecido con el complejo de que su familia era simplemente estaba en el segundo puesto, en vez del primero. De esta forma, la ambición de este para llegar a ser el primero lo hace llegar a cualquier extremo y ha relacionarse con quién haga falta. La estética del personaje es de cualquier hombre de mediana edad, pero a pesar de no tener nada o de tener poco, se las ha ingeniado de sembrar lo suficiente y aparentar lo contrario, para poder cosechar en un futuro favores y fama.
Este personaje es astuto y ambicioso, pero además se ha redondeado el personaje con un toque de humor, muy sutil, que acoge la simpatía del espectador.
Por lo tanto, es uno de los grades porqués para tener que ver este film.

Además, la historia, va dando giros algo inesperados, tal y como pueden ser en un mundo de gangster como el que representa, teniendo escenas tan memorables como el plan para hacerse con un pub, o las negociaciones con los japoneses para poder abrir un hotel-casino, a pesar de que en el principio del film, la droga que encuentra se la quiere vender a los japoneses para hundir su país.
 
Así que para poder finalizar esta reseña, sin hacer de spoiler, decir que ha sido un gran trabajo y un gran acierto traer este film a España, con un buen trabajo de doblaje gracias a Dobby Studio, y que sin duda son de esos films de Corea que hay que ver.

Por: Laia

No hay comentarios:

Publicar un comentario