Hemos hablado en otras
ocasiones de los ninjas; los asesinos a sueldo del mundo nippon.
Como bien sabemos, se trataban de asesinos a sueldo que cumplían sus misiones
mediante técnicas basadas en las artes marciales buscando siempre la mayor
efectividad y no ser detectados. Y claro, siempre que pensamos en los ninjas,
pensamos en hombre. Pero no, aunque no lo creamos existían también mujeres: las
llamadas kunoichi.
Se trataban de mujeres
preparadas desde pequeñas a las cuales
se le enseñaban las artes de la guerra además de varias artes marciales como jiujitsu,
ninjitsu…
Las más bellas eran las más
solicitadas puesto que era más fácil que se ganaran la confianza de sus
objetivos. Hay que recalcar que en
muchas de las ocasiones estas mujeres se hacían pasar por masajistas, geishas, artistas
o videntes.
Sus entrenamientos se centraban
especialmente en el engaño, el conocimiento de venenos y plantas toxicas, así
como de estrategias Kishas, las artes relacionadas con el deseo sexual. Además
también se el educaba el uso de armas especiales; armas pequeñas que podían
ocultarse en la ropa o en partes de cuerpo como el Shinobi ken ( katana
de 70cm), Kakute (anillo con puntas o cuchillas), Tonkin (punzón de
metal),…
Además de estos
instrumentos también desarrollaron una serie de objetos cotidianos con
objetivos bélicos como Getas (zapatos tradicionales japoneses) de metal
o con cuchillas escondidas, los Tessen (abanicos) que podían esconder
pequeñas dagas o puntas en ocasiones impregnadas con veneno.
La principal jonin de
clanes Kunoichi fue Chiyome Mochizuke de la familia de loa Koga
quien enseñaba a niñas huérfanas e indigentes dándoles trato de monjas y utilizando
sus servicios como espía.
Por: Mario
Fuentes: enlacresta2.wordpress.com, shinobijutsu.weebly.com
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