08 abril 2013

Reseña de "Yi Yi"

Gracias a Cameo, he tenido acceso a la película Taiwanesa Yi Yi (A one a two), primero uno, después el otro, y sin duda alguna es un film que merece una buena reseña.


Esta película se centra en la naturalidad de una familia que cuenta con problemas conjuntos y con problemas individuales.
Este retrato muestra como una familia debe de superarse después de que la abuela, querida por toda la familia, entra en coma sin saber exactamente que le ha sucedido en verdad. Aquí empiezan a surgir los temores y los problemas de cada miembro de la familia que consta de un padre, una madre, una hija adolescente y un hijo que va a primaria.


De esta manera todo se lía, ya que la madre quiere marcharse porque se siente vacía en su interior y en su vida, mientras que el padre que se tiene que quedar a cargo con todo se reencuentra con su primer amor, de cuando era adolescente. Siguiendo de forma paralela, el primer amor de la primogénita con el ex-novio de su vecina. Hasta que la persona más pequeña y quizás pura de la casa, va haciendo pequeñas acciones que dirigen de alguna manera a su familia.

Una metáfora que personalmente la he encontrado muy interesante, y también muy cierta, es el echo de que el niño pequeña hiciera fotografías de las nucas de las personas, y el porque es que al estar detrás nuestra nunca la vemos, y así no la olvidamos. De esta forma tan inocente e infantil, nos demuestra que todo tiene una cara antagonista, tanto en lo bueno y en lo malo, y que hay veces que hay que darle la vuelta a las cosas para poderlas ver con claridad o para acordarnos del otro lado. Aquí una de las primeras lecciones que nos muestra el film sobre la vida y como debemos de afrontarla.


Otra lección es sobre el refuerzo a los lazos familiares, de forma que pase lo que pase hay que apoyar al ser querido, a pesar de sus acciones y su forma de ser, tal y como queda representado por la figura del padre, siendo el niño pequeño un reflejo de este, pero con más años de experiencia. Donde el padre, pase lo que pase, sigue trabajando con su cuñado, y apoya a su mujer en la búsqueda de sus respuestas.


Así que sobre los actores, hay que destacar el papel del padre y del niño pequeño, que son entre ellos un reflejo de diferentes edades, de como ser bueno, atrae cosas buenas. Y como afrontar con sencillez las diferentes pruebas de la vida, tal como dice el título, primero un paso, luego otro paso.

Sin duda es un film realista, cuya historia puede pasar en cualquier casa del mundo, por muy complicada que se vea, ya que trata sencillamente de asuntos familiares y de romances que ocurren cada día. De esta forma el director nos hace un resumen de el significado de tener una familia, respetarse y de intentar mantenerse siempre unidos, ocurra lo que ocurra.
Una oda al sentimiento de unión familiar que actualmente tanto se está perdiendo de muchas formas distintas, y que su final no dejará a nadie sin tener una mínima reflexión sobre el mensaje del film.


Por: Laia

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